sábado, 13 de marzo de 2010

LA IGLESIA CATÓLICA, CON EL AGUA AL CUELLO

La cúpula católica alemana designó un referente especial para tratar los casos de pedofilia que se reunió con el Papa. Decenas de denuncias sacuden a la institución en ese país y rozan al hermano de Benedicto XVI. Ayer, tres curas abusadores fueron destituidos en Austria. La iglesia católica alemana es objeto desde enero de una serie de acusaciones de abusos sexuales y violencia infantil en escuelas e internados en los años 70 y 80. El gobierno alemán reaccionó duramente al criticar el muro de impunidad levantado entre las autoridades religiosas para protegerse mutuamente. Entre los escándalos denunciados figuran abusos en el famoso Coro de Niños de Ratisbona, que dirigió por treinta años el hermano del actual Papa, Georg Ratzinger.

En Austria, el arzobispo de Salzburgo, Alois Kothgasser dijo que la cúpula de la iglesia católica debe reflexionar sobre una posible reforma de la norma del celibato de los sacerdotes. "Los tiempos y la sociedad han cambiado. Por ello, la Iglesia debe preguntarse si puede mantener este modo de vida o si algo debe cambiar", disparó a la radio pública austríaca ORF-Salzburgo, desatando el debate, rápidamente sofocado por el Papa alemán.

Benedicto XVI reiteró ayer viernes el carácter sagrado del celibato para los sacerdotes tras la polémica que ha generado la abstinencia sexual. “El celibato es la señal de una consagración entera al Señor y a los asuntos del Señor, una expresión de la entrega a Dios y a los otros", recitó.

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Joseph Ratzinger (Benedicto XVI): Encubridor de pedófilos desde los años 70

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